Residencias de los Medici en Florencia: los lugares donde vivió la dinastía que durante siglos gobernó la ciudad

La dinastía de los Medici ha gobernado la ciudad de Florencia durante siglos, haciéndola grande en el mundo e influyendo en los equilibrios del tiempo. Fueron grandes mecenas, de hecho, durante su reinado promovieron el arte y la cultura, asignaron importancia a los artistas y convirtieron a Florencia en uno de los centros culturales más importantes de la época.

La historia y el arte de la ciudad están estrechamente ligados a esta dinastía: iglesias, palacios, monumentos, museos fueron erigidos por su voluntad y es suficiente con dar un paseo por el centro histórico para conocerlos.

PALAZZO MEDICI RICCARDI

Primera residencia de la familia en la ciudad, se encuentra en vía Cavour (entonces vía Larga). Fue encargada por Cosimo el Viejo en 1444 y diseñada por Michelozzo. Coronada por un marco, la fachada sobria y elegante está salpicada de ventanas dobles. En la planta baja, ventanas de rodillas se alternan con puertas que conducen al patio interior. Hoy alberga exposiciones temporales y un museo.

En el corazón del palacio se encuentra la famosa Capilla de los Reyes Magos un pequeño lugar con una escarpa elevada al altar situada en el primer piso. En la época de los Medici, esta era su capilla privada.

En tres de las cuatro paredes hay frescos realizados por el pintor Benozzo Gozzoli en 1459. Representan el viaje de los tres sabios hacia el niño Jesús. En la procesión estaban representados también algunos miembros de la familia medicea como Cosimo y Piero de' Medici, los pequeños Lorenzo y Giuliano y otras personalidades de la época como Gian Galeazzo Maria Sforza, aliado de la familia. También se distingue por la riqueza de los detalles y adornos.

El palacio albergaba inmensas colecciones artísticas que adornaban el palacio, como el David de Donatello, expuesto en el centro del patio interior.

Fue aquí donde Lorenzo de' Medici acogió a figuras ilustres de su tiempo y creó un ambiente seguro en el que los jóvenes artistas podían practicar y estudiar los modelos clásicos, aprendiendo así las técnicas artísticas. Incluso algunos fueron hospedados; entre todos destaca Michelangelo Buonarroti. Fue aquí donde el pensamiento y el arte del Renacimiento comenzaron a desarrollarse.

En 1659 fue vendido a la familia Riccardi.

PALAZZO VECCHIO

El duque Cosimo I de Medici eligió el Palazzo Vecchio, en la Piazza della Signoria, como residencia más céntrica que la anterior, en 1540. El palacio, por lo tanto, después de las obras de ampliación ordenadas por el duque, se duplicó en volumen debido a las adiciones en la parte posterior del palacio, adquiriendo así su aspecto actual. Con la corte de los Medici aquí, el palacio también asumió una función privada además de la gubernamental (era la sede del gobierno).

En el segundo piso se encuentran los apartamentos donde el duque Cosimo I vivió con su esposa Eleonora de Toledo y sus muchos hijos desde 1540 hasta 1589.

PALAZZO PITTI

El palacio fue construido para la familia Pitti siguiendo un proyecto ya existente de Brunelleschi. Este proyecto, de hecho, fue diseñado para dar cabida a la familia de Cosimo de Medici, que se negó porque pensaba que era demasiado majestuoso. Temía que pudiera atraer la envidia de la gente y así optó por el proyecto de Michelozzo. Pitti, rival de los Medici, decidió utilizar este proyecto para tener una residencia más grande y más conspicua que la que acaba de erigir el rival.

Es un hecho que en 1549 los Pitti tuvieron que vender el palacio a Eleonora da Toledo, esposa del duque. Situado en Oltrarno, la duquesa Eleonora lo prefirió a Palazzo Vecchio porque consideraba esta zona de la ciudad más tranquila y saludable para ella y algunos de sus hijos que habían contraído tuberculosis.

Era el deseo de la duquesa que el jardín de la residencia fuera ampliado y transformado para convertirse en uno de los parques más bellos del mundo, así como un modelo de un jardín italiano.

Fue una residencia de los Medici hasta la extinción de la dinastía, que se produjo en 1743 con la muerte de Anna Maria Luisa.

Hoy alberga, entre otras cosas, la Galería Palatina.

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